“Epidemiología de la hipertensión arterial en adultos mexicanos: diagnóstico, control y tendencias. ENSANUT 2020
Al menos un tercio de los adultos mexicanos tiene hipertensión arterial (HTA) y sólo la mitad de quienes fueron diagnosticados por un médico tiene valores de tensión arterial considerados bajo control. Esto fue demostrado en el artículo científico publicado por Salud Pública de México1 intitulado “Epidemiología de la hipertensión arterial en adultos mexicanos: diagnóstico, control y tendencias. Ensanut 2020”, en el cual participaron Ismael Campos Nonato, Lucía Hernández Barrera, Cecilia Oviedo Solís, Dolores Ramírez Villalobos y Simón Barquera, del Centro de Investigación en Nutrición y Salud del Instituto Nacional de Salud Pública; junto con Bernardo Hernández Prado, del Institute for Health Metrics and Evaluation de la Universidad de Washington. Asimismo, se evidenció que debe evaluarse la pertinencia de los actuales programas de diagnóstico de HTA en nuestro país, ya que el subdiagnóstico y mal control pueden ocasionar complicaciones e incluso la muerte.
Entre los aspectos mencionados en este estudio destaca el hecho de que en México la prevalencia de HTA está en la media, comparado con las cifras reportadas en países de ingresos bajos e ingresos altos; tal vez debido a que los adultos mexicanos están expuestos a factores de riesgo tales como el alto consumo de alcohol, obesidad, alta ingesta de sodio, baja ingesta de potasio e inactividad física; reconocidos también como factores de riesgo en países de ingresos bajos e ingresos altos.
Uno de los grupos de riesgo es la población de adultos mayores, pues la posibilidad de que desarrollen HTA es mayor debido a que la resistencia vascular aumenta con la edad a medida que la pared vascular se vuelve menos flexible y se presenta un menor gasto cardiaco que puede aparecer con la edad. De igual manera, el riesgo de padecer HTA es más alto para las personas obesas, puesto que la obesidad genera una mayor circulación de angiotensinógeno proveniente de los adipocitos intraabdominales, inflamación de baja intensidad y mayor reabsorción de sodio.
Otro grupo de riesgo son los adultos con hiperuricemia, pues tienen 50% más probabilidades de tener hipertensión, en comparación con los adultos con concentraciones séricas normales de ácido úrico. Asimismo, las personas adultas con diabetes –de acuerdo con lo expuesto en el presente estudio– tuvieron un riesgo dos veces más alto de HTA que los adultos sin diabetes, esto debido a los procesos inflamatorios y endoteliales que ocurren en los adultos con diabetes y al efecto estimulante de la hiperglucemia sobre el sistema renina-angiotensina-aldosterona.
Finalmente, cabe destacar que se ha demostrado que el tratamiento antihipertensivo, así como las modificaciones del estilo de vida controlan la tensión arterial (TA). Esto, aunado a las acciones que deben llevar a cabo los tomadores de decisiones para evaluar y mejorar los programas de diagnóstico y control.
Si quieres conocer más a detalle de los resultados de este interesante estudio, accede al siguiente enlace: https://saludpublica.mx/index.php/spm/article/view/12851/12169
- Campos-Nonato I, Hernández-Barrera L, Oviedo-Solís C, Ramírez-Villalobos D, Hernández-Prado B, Barquera S. Epidemiología de la hipertensión arterial en adultos mexicanos: diagnóstico, control y tendencias. Ensanut 2020. Salud Publica Mex [Internet]. 5 de noviembre de 2021 [citado 12 de enero de 2022];63(6, Nov-Dic):692-704.
Disponible en: https://saludpublica.mx/index.php/spm/article/view/12851