La educación en salud como herramienta para fortalecer a la comunidad
Como parte del ciclo de videoconferencias 2025 de la Escuela de Salud Pública de México (ESPM), la Dra. Nenetzen Saavedra Lara, subdirectora de Desarrollo y Extensión Académica de la institución, impartió la conferencia Aprendizaje en salud para la comunidad. En su exposición, la especialista destacó la importancia de fomentar el aprendizaje en salud como un proceso continuo y basado en la evidencia, con el objetivo de empoderar a las personas para que tomen decisiones informadas sobre su bienestar. La conferencia abordó múltiples aspectos sobre cómo la educación en salud puede impactar en la comunidad y generar cambios sostenibles en la prevención de enfermedades y la promoción de hábitos saludables.
Aprendizaje en salud: un proceso para toda la vida
La Dra. Saavedra explicó que el aprendizaje en salud va más allá de la simple transmisión de conocimientos; implica la adquisición de habilidades, valores y actitudes que permiten a las personas mejorar su calidad de vida. A diferencia de la educación en salud, que es un proceso estructurado de enseñanza, el aprendizaje en salud debe ser un esfuerzo colaborativo que involucre la experiencia, la observación y la práctica en la vida cotidiana.
Para lograr un aprendizaje efectivo, es fundamental considerar metodologías que integren la experiencia vivencial de las comunidades, fomentando la educación formal e informal en salud. Esto permite que las personas interioricen mejor la información y puedan aplicarla en su vida diaria. La Dra. Saavedra hizo hincapié en la necesidad de desarrollar estrategias innovadoras que permitan fortalecer la capacidad de las comunidades para identificar problemas de salud y actuar de manera oportuna.
Entre las estrategias clave para promover este aprendizaje, la Dra. Saavedra resaltó:
- La comunicación efectiva y accesible, con mensajes claros y adaptados a distintos niveles de alfabetización en salud. Esto implica el uso de materiales didácticos apropiados y campañas de sensibilización dirigidas a distintos grupos poblacionales.
- La participación de líderes comunitarios y la integración de la comunidad en el diseño de intervenciones educativas. Esto favorece la apropiación del conocimiento y fomenta el liderazgo dentro de la comunidad para replicar buenas prácticas en salud.
- El uso de herramientas tecnológicas e innovaciones pedagógicas, como simulaciones, gamificación y plataformas digitales. Estas estrategias permiten una mayor interacción con los contenidos y facilitan el aprendizaje significativo.
- La evaluación constante del impacto de las intervenciones para mejorar su efectividad. Medir los resultados a lo largo del tiempo es clave para adaptar y optimizar las estrategias implementadas.
El papel del profesional de la salud en la educación comunitaria
Durante la conferencia, se subrayó el rol de los profesionales de la salud como facilitadores del aprendizaje. Más allá de transmitir información, deben fomentar la reflexión, la toma de decisiones basada en evidencia y la adopción de hábitos saludables. La Dra. Saavedra enfatizó la necesidad de capacitar a médicos, enfermeras y promotores de salud en metodologías participativas que les permitan generar un impacto real en la comunidad.
Uno de los principales retos en este ámbito es la formación de los profesionales de la salud para que puedan adaptar su comunicación a diferentes niveles de alfabetización en salud. En muchos casos, la información científica puede ser difícil de comprender para la población general, por lo que los profesionales deben desarrollar habilidades de divulgación que les permitan hacer llegar el mensaje de manera clara y efectiva. Asimismo, se destacó la importancia de establecer alianzas con otros sectores, como la educación y el ámbito comunitario, para desarrollar iniciativas que integren un enfoque multidisciplinario.
Caso de éxito: Curso de Verano “Comunicación a favor de tu salud”
Como ejemplo de intervención educativa efectiva, la Dra. Saavedra presentó el curso de verano Comunicación a favor de tu salud, dirigido a adolescentes de 13 a 16 años. Esta iniciativa, desarrollada desde la Subdirección de Desarrollo y Extensión Académica de la ESPM, a través de la Unidad de Divulgación y Cultura de esta institución, busca prevenir adicciones y promover hábitos saludables a través de estrategias innovadoras de enseñanza y el uso de herramientas digitales.
Las y los participantes no solo adquirieron conocimientos teóricos sobre salud y prevención de adicciones, sino que también tuvieron la oportunidad de desarrollar sus propios contenidos y materiales de comunicación utilizando herramientas tecnológicas, acompañados en el camino del aprendizaje por expertos en comunicación, producción audiovisual y salud pública. La intervención permitió que las y los adolescentes se convirtieran en agentes de cambio en sus comunidades, promoviendo mensajes de salud entre sus pares y sus familias.
Los resultados del curso han sido contundentes: el 90% de los participantes reportó un mayor interés en temas de salud y el 100% adquirió habilidades para producir y difundir contenidos informativos. Meses después del curso, algunas de las y los adolescentes reportaron que siguen aplicando lo aprendido, generando cambios en sus hábitos y promoviendo hábitos más saludables, como decidir nunca consumir productos de tabaco –incluido los cigarros electrónicos– o dejar de hacerlo, entre otras personas cercanas a ellas y ellos. Este impacto positivo demuestra la efectividad de las estrategias educativas centradas en la participación activa de los jóvenes.
El reto de combatir la desinformación y fortalecer la alfabetización en salud
Uno de los desafíos más grandes en la educación en salud es la proliferación de desinformación en redes sociales y medios digitales. La Dra. Saavedra alertó sobre la influencia de mensajes engañosos y la necesidad de fortalecer la alfabetización en salud para que las personas puedan identificar fuentes confiables y tomar decisiones acertadas. También destacó el potencial de las redes sociales y la inteligencia artificial como herramientas para difundir información científica de manera atractiva y accesible.
Se enfatizó la importancia de desarrollar estrategias de comunicación que compitan con la información errónea que circula en el entorno digital. Esto implica el uso de narrativas visuales, videos cortos y contenidos interactivos diseñados para captar la atención del público y generar conciencia sobre la importancia de la salud pública. Además, se hizo un llamado a la colaboración entre instituciones académicas, gubernamentales y organizaciones sociales para crear campañas educativas de alto impacto.
Conclusión: educar en salud es una inversión, no un gasto
Para cerrar su intervención, la Dra. Saavedra enfatizó que la educación en salud no debe verse como un costo, sino como una inversión para mejorar el bienestar de la población. Invitó a profesionales de la salud, educadores y líderes comunitarios a sumar esfuerzos para diseñar estrategias de aprendizaje efectivas, basadas en evidencia y adaptadas a las necesidades de cada comunidad.
Con iniciativas como estas, la ESPM refuerza su compromiso con la educación en salud y la divulgación científica, promoviendo estrategias innovadoras para mejorar la calidad de vida de la población mexicana. La conferencia concluyó con un espacio de preguntas y respuestas, en el que se discutieron inquietudes sobre metodologías de enseñanza, evaluación de impacto y la necesidad de una mayor formación en comunicación para la salud dentro de los programas académicos.
Por: Mtra. Aldara Cabrera Osnaya, Unidad de Divulgación y Cultura, ESPM